Me cansé de esta angustiosa soledad
y sólo para distraer a la ansiedad
Con sangre, tu recuerdo, me puse a cebar.
Con mil besos a la bombilla hirviendo
borré de mis labios todos tus excesos.
Cuando me dispuse a no beberte
yerba sudaca, de tu infierno volviste,
insoportable esencia aguamarina
a convertirme a fuego lento
en dulce de leche andina, clandestina,
para consumir a cucharadas mi universo.
Dejas caer de tus manos mi cuerpo yerto
sobre las lunas medias de tu ser abyecto
y luego compartes con “ella”
facturitas de manteca
acompañadas de mentiras
y amargos sueños nuevos
y sólo para distraer a la ansiedad
Con sangre, tu recuerdo, me puse a cebar.
Con mil besos a la bombilla hirviendo
borré de mis labios todos tus excesos.
Cuando me dispuse a no beberte
yerba sudaca, de tu infierno volviste,
insoportable esencia aguamarina
a convertirme a fuego lento
en dulce de leche andina, clandestina,
para consumir a cucharadas mi universo.
Dejas caer de tus manos mi cuerpo yerto
sobre las lunas medias de tu ser abyecto
y luego compartes con “ella”
facturitas de manteca
acompañadas de mentiras
y amargos sueños nuevos