(Yo) A besos el mate y (tú) el dulce a cucharadas


Me cansé de esta angustiosa soledad
y sólo para distraer a la ansiedad
Con sangre, tu recuerdo, me puse a cebar.

Con mil besos a la bombilla hirviendo
borré de mis labios todos tus excesos.

Cuando me dispuse a no beberte
yerba sudaca, de tu infierno volviste,
insoportable esencia aguamarina
a convertirme a fuego lento
en dulce de leche andina, clandestina,
para consumir a cucharadas mi universo.

Dejas caer de tus manos mi cuerpo yerto
sobre las lunas medias de tu ser abyecto
y luego compartes con “ella”
facturitas de manteca
acompañadas de mentiras
y amargos sueños nuevos

1 comentario:

  1. Zaz!!!! extraño sentimiento el que deja, pero lindo

    Besitos para mi Ketz

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